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La caja de botones de Gwendy o la Pandora de Stephen King

George Valencia nos trae una completa nota sobre la trilogía que comienza con La caja de botones de Gwendy. De paso, también tira mucha data acerca de Castle Rock, ciudad creada por King, en la que transcurren muchas de sus historias.

Nace La caja de botones de Gwendy

Hace seis o siete años, mientras todavía se encontraba trabajando en la trilogía de Bill Hodges (compuesta por las novelas Mr. Mercedes, Quien pierde paga y Fin de guardia), Stephen King comenzó a jugar con la idea de una Pandora moderna. Ya saben, la mujer a la que según la mitología le fue entregada en custodia una caja (o una jarra, según algunas versiones) que al final abrió, solo para terminar liberando todas las desgracias que aquejan a la humanidad.

¿Qué pasaría si una chica de la actualidad recibiera una caja con un poder semejante? Al escritor nacido en Maine le encantó la idea y se puso a trabajar. Sin embargo, muy pronto se quedó sin combustible, cosa que no le pasa a menudo a un autor que ha publicado más de setenta libros en los cuales se han basado infinidad de adaptaciones cinematográficas y televisivas. En todo caso, la historia quedó relegada por un par de años. Entonces, un día, Richard Chizmar le propuso escribir algo juntos. A King le sonó, y se le ocurrió enviarle su inacabada historia a ver qué sucedía.

La caja de botones de Gwendy

Richard Chizmar es el fundador de Cemetery Dance, una editorial especializada en los géneros del terror y la fantasía oscura que en años recientes ha publicado varias ediciones limitadas de Stephen King, además de ser la que tuvo la exclusiva de la publicación de Blockade Billy. Chizmar también compila antologías, escribe ficción, produce películas, escribe guiones y enseña escritura. Nada mal.

El experimento de coautoría funcionó y aquella historia de la moderna Pandora se convirtió en una de las pocas colaboraciones que King ha escrito. Ya lo había hecho con autores como Peter Straub (El talismán y Casa negra), su hijo Joe Hill (con los relatos «En la hierba alta« y «Throttle»), Stewart O’Nan (con quien escribió una crónica del triunfo histórico de los Red Sox en 2004, Campeones mundiales al fin, y el relato «Un rostro en la multitud») y finalmente con su otro hijo, Owen King (Bellas durmientes).

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Pero centrémonos ahora en La caja de botones de Gwendy. Un día del verano de 1974, Gwendy Peterson, de doce años, se encuentra trotando en uno de los cerros de la pequeña ciudad de Castle Rock cuando se topa con un hombre ataviado de forma bastante extraña para un día caluroso: jeans, abrigo y sombrero. Todo de negro. «Llegará el momento en que Gwendy tendrá pesadillas con ese sombrero…».

Tras derribar sus reservas y demostrarle que la conoce más de lo que ella cree, el hombre la hace depositaria de una pequeña y hermosa caja de caoba adornada con ocho botones de colores y pequeñas bandejas de plata que le dispensan unos objetos inusuales. De esta caja dependen más cosas de las que parecen a simple vista, especialmente si oprimes uno de los botones. Es una extraña responsabilidad, pero el hombre asegura que ella es la persona indicada. De hecho, según él, la caja le pertenece… Instantes después, el hombre parece esfumarse, dejando a Gwendy sola. Con la caja.

Esta novela corta, publicada originalmente en 2018, fue lanzada por Penguin bajo su sello Suma de letras. La caja de botones de Gwendy posee varias lecturas. Está la del lector novato que recién se adentra en el mágico universo del Maestro del terror. Este lector se va a encontrar una obra sin mayores pretensiones más allá del puro entretenimiento, donde vemos la evolución del personaje de Gwendy a lo largo de varios años mientras el paso de la niñez a la adolescencia la lleva a valorar de diferentes maneras la caja que posee en custodia y el enorme poder que alberga. A la larga, la caja misma proyecta su fuerte influencia en la hija de los Peterson, que de pronto comienza a adelgazar, ve su acné desaparecer, se vuelve más guapa y parece que todo le sale bien en el colegio y en la vida. Bueno, casi todo…

Los extraños sucesos que le ocurren a Gwendy a lo largo de la historia están cargados de una especie de tensión contenida, la suficiente como para devorar la novela en dos o tres horas. Pero quizá la parte más interesante es el desarrollo del personaje a medida que pasa el tiempo, así como su interacción con la caja de botones.

Por otra parte, tenemos la óptica del Lector Constante, como define el propio King a los lectores asiduos de su obra que le han (hemos) acompañado a lo largo de los años. Este lector hallará un primer guiño en la aparición en escena de un tal Richard Farris, un hombre bastante misterioso que, por supuesto, no tardaremos en relacionar con Randall Flagg, Richard Fannin o Rudin Filaro, el multifacético individuo que bajo distintas identidades ha campado por varias obras del maestro, tales como Apocalipsis, Los ojos del dragón o su magnum opus: La torre oscura.

La ciudad misma en que transcurre la novela, Castle Rock, seguramente le resultará familiar a los Lectores Constantes en mención. “La Roca”, como se le conoce coloquialmente a esta ciudad ficticia (tan importante en su obra como Derry, Haven o Little Tall Island), ha sido escenario de algunas de las mejores historias del “tío Steve”. Apareció por primera vez en 1977 con la publicación de La zona muerta, y con los años las obras que allí tienen lugar han sido catalogadas como pertenecientes a lo que se ha dado en llamar…

King y Chizmar

El Ciclo de Castle Rock

El Ciclo está compuesto por una serie de historias de Stephen King que tienen como escenario a la pequeña ciudad de Castle Rock. Pero es mucho más que eso: existe una conexión importante entre todas ellas y un orden específico de lectura que se rige inicialmente por la fecha de publicación. Existen algunos relatos o novelas que mencionan de paso a la ciudad (como Cementerio de animales, «Rita Hayworth y la redención de Shawshank», Cazador de sueños, La cúpula, entre otras) o donde Castle Rock tiene cierto protagonismo (El juego de Gerald, La historia de Lisey, «Nona» o Un saco de huesos).

Pero el Ciclo propiamente dicho empieza con La zona muerta, la novela de 1977 donde conocemos la ciudad por primera vez. Aquí encontramos personajes que aparecerán en novelas posteriores, como el sheriff George Bannerman o el oficial de policía Frank Dodd. Luego vienen El cuerpo, novela corta incluida en Las cuatro estaciones, y Cujo, de 1981. La clásica novela del San Bernardo que se contagia de rabia tras la mordedura de un murciélago, empieza precisamente recapitulando los hechos narrados en La zona muerta.

En este punto entran dos de los relatos cortos más significativos del Ciclo: «El camión del tío Otto» y «El atajo de la señora Todd», ambos incluidos en la antología Skeleton Crew, de 1985, que si bien no tienen mucha incidencia en la trama principal, sí mencionan personajes y hechos ya conocidos. Hasta aquí podríamos hablar de una primera fase en la historia del pueblo. Luego, como dijo el propio Stephen King, «era el momento de terminar las cosas, y hacerlo de manera contundente».

Y es cuando aparece una especie de trilogía final de Castle Rock. El primero de los relatos es La mitad oscura, de 1989. A pesar de transcurrir en su mayor parte en Ludlow, la ciudad figura en el libro y sirve para presentar a nuestro amigo el sheriff Alan Pangborn. Además, por supuesto, de mencionar hechos acaecidos en La zona muerta y Cujo.

Después viene «El perro de la Polaroid», el cuarto relato de Las cuatro después de medianoche, de 1990, que «preparará el escenario para el castillo de fuegos artificiales del final», en palabras del propio Stephen King. Aquí conocemos al viejo Papi Merrill, tío de Ace Merrill, el chico malo de «El cuerpo». El broche final es nada menos que La tienda, o Needful Things en inglés, donde Alan Pangborn es protagonista principal y donde encontramos un completo desfile de viejos conocidos de todas las novelas y relatos anteriormente mencionados. El punto final del Ciclo resultará ser realmente apoteósico.

Aunque parecía estar todo dicho en la ciudad de Castle Rock, recientes novelas fueron ambientadas allí, trayendo nuevamente a la vida un pueblo que está grabado a fuego en el imaginario de los lectores. Una de estas novelas fue Elevación; la otra, en efecto, ha sido la historia de Gwendy Peterson.

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Las secuelas

Ahora bien, para completar este repaso por La caja de botones de Gwendy, es imprescindible mencionar que esta novela corta aparentemente menor dentro de la bibliografía de Stephen King ha terminado convirtiéndose en una trilogía, un hecho que seguramente se lo debemos a Chizmar. Y es que en 2019 veía la luz Gwendy’s magic feather (La pluma mágica de Gwendy), una secuela escrita enteramente por Richard Chizmar con el consentimiento de King.

La caja de botones de Gwendy 2

«¿Y si hubiese más historia por contar?», se preguntó el editor de Cemetery Dance. King se mostró interesado, pero no del todo convencido. Sin embargo, cuando Richard le contó su idea, no solo le gustó, sino que además se sintió celoso y, sin más, le dio luz verde (aunque a decir verdad, Gwendy fuese una creación de ambos). En esta segunda parte, algo maligno se ha apoderado de la pequeña ciudad de Castle Rock, en Maine. El alguacil Norris Ridgewick (otro viejo conocido) y su equipo están buscando desesperadamente a dos niñas desaparecidas, pero el tiempo se acaba y cada hora que pasa es crucial… En Washington DC, Gwendy Peterson, de treinta y siete años, es ahora congresista y autora publicada, y lleva una vida exitosa. Lo cual no impedirá que se vea involucrada en la investigación…

Por último, en febrero de 2022 se publicó en Estados Unidos Gwendy’s final task (La última misión de Gwendy), la novela que cierra la trilogía y donde King y Chizmar forman equipo de nuevo para cerrar la historia de esta entrañable protagonista que se ha ganado el cariño de los lectores. La portada, por cierto, presenta cierta torre oscura en el fondo (y un campo de rosas en una de sus ediciones), hecho que por supuesto generó grandes expectativas en los Lectores Constantes.

La caja de botones de Gwendy 3

¿Y la caja? Bueno, para ello tendrán que leer la novela, una de las creaciones literarias más interesantes de los últimos años en la obra de Stephen King.

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