CONTRATAPA
Una antología de 15 relatos de horror en parques de diversiones. Monstruos y fantasmas. Autos chocadores y montañas rusas. Atracciones que muestran los dientes en un lugar en el que no todo es lo que parece.
Santa Guadaña, nuevamente, reúne a destacados autores de horror de la literatura argentina y los suelta en este salvaje parque de diversiones en donde la muerte se mezcla con la risa, y las pesadillas más oscuras tienen olor a garrapiñadas.
¡No esperes más! ¡Metete en Italparka!
RESEÑA
Si creías que los parques de diversiones estaban hechos para generar alegría te recomiendo Italparka. Esta antología de 15 relatos llegó para demostrar que un lugar lleno de luces, dulces y juegos puede helarte la sangre con el horror que esconde. Mimos terroríficos, payasos enanos y deformes, entidades sobrenaturales y pactos demoníacos, una variedad creada para dejar satisfechos a todos.
Puede apreciarse el estilo de cada uno de los escritores que forman parte de este libro, pudiendo disfrutar de una colección que mantiene un alto nivel. Por supuesto tengo mis favoritos, algunos me gustaron más que otros, pero ninguno defrauda y es una grata sorpresa descubrir un gran trabajo de autores que me eran desconocidos.
Los relatos son variados, abarcando diversas temáticas. Cada uno posee su propio estilo, la mayoría de las veces único. Con buenas resoluciones e historias originales, en varias oportunidades me dio la sensación de que hay un hilo que los une más allá de la premisa de fondo. Personajes similares, lugares en común, coincidencias que sientan bien y dejan una excelente sensación. Desconozco si se trataron de casualidades o de algo premeditado, pero es un gran acierto.
Mi favorito personal es “Pacto embrionario” de Fabio Ferreras, una obra cruel, un trabajo delicado que cumplió su objetivo y me llegó. Y llegó fuerte. Es de esas historias que cuando pase el tiempo la seguiré recordando. Un cuento ideal para releer cada tanto, volviendo a ser cautivado por lo macabro. Otros relatos que a mi criterio merecen especial mención son “Planeta tiomuerto” de Marcos Noero, “No está” de Diego Arandojo (este es brutal, exponiendo una de las problemáticas que más afectan a nuestra sociedad), ZHISH de Leonardo Posadas y “Cuando deja de hablar” de Rubén Risso (este me encantó, tiene varias partes poéticas, con oraciones que riman entre sí y un estilo bien trabajado).
Es momento para destacar algo que me llamó mucho la atención. Gonzalo Ventura vuelve a dar la nota en “Un odio que incendiase todo”, donde nos presenta un inicio fuerte para muchos lectores, principalmente para los de nuestro país. Todas las sociedades tienen momentos grabadas a fuego en el corazón de su historia, algunos generados con alegría y otros hechos a base de sangre. La dictadura hace eco en este relato, provocando un escalofrío al momento de leer las primeras líneas, las cuales causan sorpresa al ser algo totalmente inesperado. Con un cachetazo tomamos conciencia de que el verdadero horror se encuentra mucho más cerca de lo que pensamos.
“El parto había sido en un sótano. No sabía bien cuánto había pasado de eso, pero ahora la tenían atada a un camastro con un colchón todo sucio y de vez en cuando le traían al nene para que le diera la teta.
Sintió que alguien se acercaba del otro lado de la puerta y trató de aguantar el miedo. Podían ser dos cosas: iba a ver a su hijo o la iban a llevar para tortuararla.
Escuchó los ruidos de las llaves. Ella estaba vendada, pero igual veía un poco. Lo suficiente como para saber quién era el que entraba. No había tenido suerte. No le traían al nene.”
De la fosa nos vuelve a traer terror del bueno, una obra excelente y con un buen trabajo de edición. Si bien la antología es disfrutable por cualquier persona, tiene un valor agregado para todos aquellos que en algún momento hayan puesto pie en parques de diversiones. Haber vivido esa experiencia hace que este libro cobre vida de una manera diferente, trayendo recuerdos agradables y dándoles un nuevo significado.
Para quienes tuvieron la suerte de recorrer el mítico Italpark, la nostalgia se va a mezclar con el miedo y la piel se va a erizar creando una experiencia indescriptible.
Una editorial dedicada exclusivamente a la sangre, al terror y al suspenso.
Desde su creación, la meta fue clara: ofrecer relatos que vuelvan a las raíces del género, pero buscando algo nuevo en ese retorno. Algo distinto que aporte originalidad.
Para sus directores, Gonzalo Ventura y Martín Blanco, los monstruos son monstruos y el horror tiene que dar miedo.
Por eso, toman el camino de regreso a lo primordial: la angustia, el mal sabor, lo que está torcido.
Escritor en desarrollo, lector empedernido. Divido mi tiempo entre libros, series y familia. Tengo predilección por escribir terror y misterio, mientras que elijo para leer libros de casi todos los géneros. Tengo la debilidad de enamorarme de una portada o una sinopsis.
