Dirigida por Daniel de la Vega, “Necrofobia” (2014) es una película argentina que podemos catalogar dentro del género slasher.
Dante Samott (Luís Machín) es un sastre que no la está pasando nada bien: a la separación con Beatriz (Julieta Cardinali) debe sumarle la muerte de su hermano gemelo, Tomás. El psiquiatra de éste le aconseja que se deje ayudar, que no cometa su mismo error. Dante afronta la situación a base de alcohol y pastillas… No, no le hace mucho caso al profesional.
Los primeros veinte minutos de la película se me hicieron bastantes pesados. Hay que esperar un poco para que llegue lo bueno. Pero llega. Créame, lector, que llega.
Una extraña llamada le avisa a Dante que su ex mujer está con otro tipo en un hotel. Y lo insta a no dejar las cosas así nomás. A partir de acá comienza a aparecer un hombre de identidad desconocida, vestido con un sobretodo y un sombrero de ala ancha. Todo de negro. Y los homicidios empiezan a ocurrir.
Dante está convencido de que su hermano anda detrás de todo esto, habiendo revivido (o quizás nunca estuvo muerto) para asesinar a todos en su entorno.
El reparto es completado con el sacerdote (Gerardo Romano) y la policía (Viviana Saccone).
Cuchillos, tijeras, sierras y algún descuartizamiento… ¿La vemos?

Oriundo de Ezeiza, nació en 1990 y es profesor en Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. Se desempeña en escuelas de nivel secundario, tanto con adolescentes como con adultos. Recibió menciones especiales y de honor en varios concursos literarios, y participó con cuentos en distintas antologías. Es bibliómano, bibliófilo y todo eso.